martes, 26 de mayo de 2009


De aquellos tiempos de angustia y sabor amargo de los caramelos que parecían ser de chocolate y terminaban siendo los media hora.
De olores, de olfatos...hablábamos, decíamos una cosa y otra, una cosa y otra..., y terminábamos peleados. Después de media hora nos reconciliábamos.

miércoles, 20 de mayo de 2009


Tengo una pared llena de azúcar

que aun esta en proceso

y eso cura.

sábado, 16 de mayo de 2009

Contemplar Tres Momentos.


De esta realidad que se bifurca, que se separa de cada partícula que la une, y vos… ¿Dónde estas?

La ciudad se torna cada vez más oscura, se opaca y nutre de egoísmo, de verdades inciertas; la ciudad te encuentra y vos tenes que dejarte llevar como una maquina que no deja de pensar para poder sobrevivir. En un mundo donde todo te supera vos vagas por lugares, por espacios únicos, rumbo a esa cúspide que tanto deseas. Deambulas como un noctámbulo para borrar todas esas heridas, esos rasguños, esas puñaladas que lastiman. Buscas tu lugar, tu consuelo, tu momento. Tu cuerpo oscila entre esos caminos, divagas, caminas, tus sentidos son más profundos, tus piernas se mueven lento, tu mirada se mantiene y ya perdes la
noción del tiempo. Tu realidad se dilata y desparece.
Te escabullís en enormes horizontes sinuosos y cada instante atraviesa tus sentidos; respiras aromas dulces, tu sabor amargo se evapora, tu disgusto se transforma en ese éxtasis que mas anhelabas y dejas atrás cada imagen que odias para escalar hasta la cima del placer que inyecta tus venas de amaneceres, de mares y mañanas.
Este es tu resplandor. Esto es la calma a esa impotencia de no poder creer. Te preguntas porque toda tu realidad te es tan indiferente, pero no encontras respuestas, porque ahora estas embriagado de encanto.

. Como explicar el vacío de los fuegos artificiales, no se puede.
Es imposible.

Sin Nombre.


Cuando tu búsqueda no es mas que una simple insatisfacción.Deseas lo inesperado y aun deseas…que en todo este mundo este lo esperado.Las razones de tu existencia se disuelven en la eterna estadía de tu propio ser que deja de relamer las heridas,que dejan de desesperar como dos almas que gravitan en aquellas tempestades de humo y miel que anhelamos juntos.Basta de inconsciencias que no sirven, dejemos que el temor divague en nuestras miradas y seamos los seres más inalcanzables de este planeta.

viernes, 15 de mayo de 2009


Culpa.

Las gotas de agua que penetran en mis ojos como dos coágulos de sangre que luego caen espesos sobre la cerámica diluyéndose en el olvido del momento, de la culpa.
Y ahora los oídos hablan diciéndome basta, pero la distancia desborda todos los sentidos, aun aquellos que no son parte de nosotros y que no se sumergen en nuestras locuras…aquellos que sin sentirlos procuran en los momentos de tortura o mejor dicho de desolación o soledad.
¿Qué más se puede confesar en una noche de viento que sacude las neuronas dejándome llevar por el disgusto? Por este mediodía que esta por llegar. ¿Que más decir? Si las voces todo lo dicen, si esta madrugada todo lo dice.
La humedad en el cuerpo y los ojos más deslumbrados desembocan en el final del día que concluyen en eternas palabras de nuestro imaginario que no es realidad.
Y la disforia marca las partes que nacieron, entre estos matices, entre miles de noches.

Para que fueras en mí Sangre.

Que estúpida tu obsesión de mierda de querer esconderte, de querer chupar de mí.
Qué queres si no tenes nada, si no deseas nada, si no perdes nada. Si tu pelo es irresistible.
Tu boca ácida hace que todo el tiempo estés frente al espejo, que antes de sentarte en el inodoro fumes, que antes de calentarte la comida bosteces y una mosca caiga en tu baso.
Después de todo te sentas a desayunar para ir a la calle, para escuchar las canciones que te sirven, que te contienen como nadie lo hace. Si nada te contiene, si nada te conmueve.
Y si pensabas que esta mierda te iba a servir... como te confundiste. ¿Como te pudiste equivocar? Si vos sabias que yo para vos soy esa mosca en el vidrio.
Que si tus piernas hablaran dirían, que si tu bombacha roja escuchara oiría. Lo que te digo... que cuanto espere para que fueras en mí sangre.
Para que fueras en mí sangre.